Con 82 pitcheos, 55 de ellos strikes, el derecho de Barquisimeto mostró solidez y recibió una ovación de pie al salir del montículo, recoge El Fildeo.
Su esfuerzo fue respaldado por una ofensiva explosiva de los Yankees, que conectaron jonrones de Aaron Judge, Trent Grisham y Jazz Chisholm, acumulando 22 cuadrangulares en seis juegos.
Nadie esperaba que Carrasco, quien llegó como invitado no roster al entrenamiento primaveral, estuviera en esta posición tan temprano en la temporada.
Sin embargo, las lesiones de Gerrit Cole (fuera todo el año por cirugía Tommy John), Luis Gil (hasta junio) y Clarke Schmidt (tendinitis en el hombro) abrieron la puerta para que el venezolano se ganara un lugar en la rotación con una efectividad de 1.69 en la primavera.
Esta victoria lo convierte en el decimocuarto pitcher en la historia de los Yankees en ganar su primera apertura con el equipo a los 38 años o más, y el primero desde Randy Johnson en 2005.
Aunque su tiempo en la rotación podría ser temporal —Schmidt regresará en unas semanas—, Carrasco aprovechó esta oportunidad para demostrar su valía. “Solo tengo que salir y competir”, dijo antes del juego, y eso hizo, dejando una marca imborrable en su debut como Yankee.